En el día a día, todos tenemos distintas actividades y estilos de vida que nos hacen ser quienes somos, pero ¿Sabías que hay ciertos hábitos que pueden estar jugando en contra de tu piel, sin que te des cuenta?
Desde tocarte la cara o las sábanas de tu cama, hay varias cositas que podrían estar saboteando tu rutina anti-granitos, pero relájate que hoy te vamos a contar cuáles son esos detallitos a los que debes prestar atención para complementar el cuidado de tu piel.
Tocarte la cara constantemente:
- Este hábito que parece "inocente" puede transferir bacterias y aceites a tu piel, obstruyendo los poros y provocando posibles brotes. Sobre todo ten mucho cuidado cuando tienes las manos sucias, no quieres llevar todas las bacterias de la calle a tu carita.
- ¿No lo sabías? Tus sábanas pueden ser un cultivo para las bacterias que causan el acné. Dormir y exponer tu piel a las sábanas sucias puede transferir gérmenes a tu piel, lo que agrava los brotes. Lava tus sábanas al menos una vez a la semana para mantener tu piel fresca y limpia.
- Claro que hacer ejercicio tiene muchísimos beneficios, pero, si no limpias tu piel después podrías estar dañándola. Limpia tu piel suavemente con una toalla y al finalizar tu rutina trata de enjuagarte con agua para eliminar cualquier residuo.
- Este es uno de los más comunes y de los que más nos dañan, pues usar productos que no son compatibles con tu piel sólo agravarán el problema. Recuerda que el sistema anti-acné Faceit de 3 pasos te ofrece una solución completa para combatir el acné de manera efectiva y lo puedes usar si tu piel es normal, grasa o mixta.
Al identificar y corregir estos hábitos que pueden estar empeorando tu acné, estás dando un paso importante hacia una piel más saludable. Solo es cuestión de atención y los productos adecuados para llevar a tu piel al siguiente nivel.
Si estás listo para darle a tu piel el cuidado que se merece, ¡prueba nuestro Kit Anti-acné de FACEIT y comienza tu viaje hacia una piel más radiante hoy mismo!